ACCASTELLO LAS PREFIERE FLACAS

GRAVE DENUNCIA POR DISCRIMINACIÓN EN VILLA MARIA Dos empleadas municipales denuncian que fueron discriminadas. Presentaron una denuncia ante el INADI y acudirán a la Justicia. El enigma de un "fondo" municipal alimentado con sueldos en negro. "Quien arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o de algún modo menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igualitarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional, será obligado a dejar sin efecto el acto discriminatorio o cesar en su realización y a reparar el daño moral y material ocasionados", reza en su artículo primero la ley 23.592 que penaliza los actos discriminatorios. "A los efectos del presente artículo se considerarán particularmente los actos u omisiones discriminatorios determinados por motivos tales como raza, religión, nacionalidad, ideología, opinión política o gremial, sexo, posición económica, condición social o caracteres físicos", continúa. En la Municipalidad de Villa María, según las denuncias realizadas por dos empleadas, parece que han olvidado el significado de estos dos párrafos. Así fue que María Celesta Combina, trabajadora municipal del área de Turismo, denunció que durante dos años fue agredida verbal y psicológicamente por su jefe, Henry Rappetti, haciendo hincapié en su sobrepeso. "Siempre me hacía bromas y un día me dijo que para que me regalara un anillo de oro lo tenían que hacer con un lingote", dijo Combina dejando ver su mezcla de dolor y bronca. Además narró que Rappetti se refería a ella como "la gorda" y que de forma despectiva la enviaba a la panadería (en una clara señal de desprecio por su alimentación). La empleada municipal, que trabajaba en la cabina de Turismo -al ingreso de la ciudad- junto a su compañera Alicia Falco, llevaron el caso a la delegación Córdoba del Instituto Nacional contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia (Inadi), denunciando discriminación por caracteres físicos, es decir por su obesidad. "Tengo mucho pánico a mandar un currículum a otro lugar, porque si en la Municipalidad me discriminaron, ¿qué podría hacer otra persona dueña de una empresa?", expresa con temor la joven al narrar su historia. A pesar del acompañamiento psicológico con que hoy cuenta, admite no poder manejar la situación: "Yo sé que no es así, pero muchas veces pienso que me merecía el desprecio y los malos tratos". En el relato de las empleadas, no sólo se habla de insultos y "bromas" descalificadoras, sino de un sueldo inferior al del resto, más horas de trabajo e inclusión de días feriados. Todo a raíz de la supuesta antipatía del funcionario accastellista. Rappetti codirigió el área de Deportes y Turismo durante el Gobierno de Nora Bedano y actualmente espera ser designado por el nuevo intendente Eduardo Accastello como presidente de la empresa Villa María Deporte y Turismo Sociedad de Economía Mixta. "Es terrible ésta situación, yo me quedo sin trabajo y a él que me discriminó lo premian", expresó indignada Combina, que junto a su compañera no sólo no cobraron el sueldo sino que hoy se encuentran sin posibilidades de ingresar a su lugar de trabajo sin explicación alguna Más denuncias Adriana Domínguez, delegada cordobesa del Inadi, le dijo a la revista EL SUR que "se ha dado curso a la denuncia, solicitando el descargo del funcionario". El mismo tenía un plazo de vencimiento del día viernes 21 de diciembre del año pasado, pero no se presentó. "Se envió otra intimación que tenía como fecha de vencimiento los primeros días de enero", agregó Domínguez. La esquiva actitud de Rappetti de no presentarse ante el Instituto no sólo perturba el accionar correcto de la Justicia sino que, en éste caso, logró ser favorecido por la inactividad en la feria judicial. Éste medio intentó sin éxito comunicarse telefónicamente en varias oportunidades con el funcionario que, a pesar de no haber sido nombrado oficialmente, encabeza actualmente las actividades relacionadas al Turismo y el Deporte generadas por la Municipalidad villamariense. En tanto, la abogada Cecilia Pérez Correa, que representa legalmente a las empleadas, explicó que presentó un amparo para que las mismas regresen a su actividad laboral, pero la jueza civil Ana María Bonadero de Barberis impuso condiciones increíbles: "La jueza pide pruebas de que ellas sean empleadas, pero eso es parte del juicio, ahora sólo debe considerarse la verisimilitud de los hechos narrados y reincorporarlas porque precisan trabajar con urgencia", sostuvo la abogada de las trabajadoras. En tanto aseguró que "la jueza pide no sólo testimonios de los compañeros, sino un recibo de sueldo, que la Municipalidad no les entregaba porque las tenía trabajando en negro". Más denuncia A ésta acusación se le suman siete empleadas que a través de un reclamo administrativo y una próxima presentación ante el Inadi y la Justicia local "destapan" una práctica presuntamente fraudulenta a la hora de cobrar los sueldos de los facturantes municipales de Villa María. - - - FUENTE: REVISTA SUR, ESCRIBE LUCÍA PAIROLA - (Puede leer la nota completa en la edición impresa de revista El Sur de febrero, de venta en kioscos de Córdoba, Río Cuarto, Villa María y zona de influencia.