El Diario, publicó hoy los términos de un reclamo realizado por la Municipalidad de Villa María al SUOEM . El mismo tiene razón de ser en la no rendición de cuentas de los 29 mil pesos que la administración de Eduardo Accastello supo darle a la organización gremial.
Según la página 5 de El Diario se trata de 10 mil pesos entregados el 8 de enero de 2010, para la compra de bolsones navideños que el sindicato habría entregado a los afiliados. Otra cuenta que suma y no ha rido rendida por el gremio, cuyo secretario general es Dante Agüero, econsiste en tres mil pesos que el municipio entregó para que el sindicato realizara los festejos del día del empleado municipal y la contratación del músico Toro Quevedo.
En una clara relación de complicidad, contraria a una conducta sindical adecuada, la administración de Accastello también le otorgó al SUOEM 16 mil pesos, el 25 de febrero de 2009, declarando que el gremio compraría útiles escolares.
Más allá de los datos concretos de la solicitud de rendición de cuentas, considero que la publicación pone de manifesto la relación antisindical que existe entre las dos entidades. Es lícito preguntarse qué grado de independencia puede mantener un gremio que recibe tales atenciones de la patronal. Cómo también resulta lógico preguntarse qué intención anida en los políticos que otorgan estos montos, con plata de los ciudadanos, a una organización gremial. Si a estos interrogante se le suman las declaraciones de personas no gratas que han sufridos los cabecillas del gremio en la ciudad de Villa Nueva, por parte de la asamblea de trabajadores que se han sentido traicionados por los dirigentes. Si se suma esto decíamos, van surgiendo las respuestas. Incluso si se recuerda la desafiliación que se produjo el año pasado cuando la Comisión Directiva del SUOEM le dio la espalda a los municipales de Villa María que demandaban no ser discriminados y recibir el pago del adicional por movilidad. Se desafiliaron trabjadores con 40 años de afiliados, cuestión que es todo un dato a tener en cuenta.
El artículo de El Diario pone luz sobre una relación poco ortodoxa que el SUOEM mantiene con la patronal. Incluso podemos recordar cuando desde la C.D. del gremio se justificó que los vecinos, admnistración municipal mediante, pagaran las cuentas de teléfonos celulares que estaban en poder del SUOEM aduciendo que se "debían coordinar actividades".
Sí, coordinar actividades entre la patronal y la gremial. Cosa que tampoco se explica mucho salvo cuando se agrega el dato de que muchas veces las autoridades de ese gremio se portan como patronal o directamente , como en el caso de Villa Nueva, recomiendan que los empleados sean sancionados si reclaman que les pagen sus salarios.
Toda una manera de practicar el gremialismo, claro que lejos de la defenza de los derechos de los trabajadores.
Jesús Chirino
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