CTA ratificó la violencia policial

Sobre artesanos detenidos en la Terminal de Omnibus Para la central obrera los episodios violatorios de los derechos de las personas detenidas se registraron durante el procedimiento y en la Comisaría en donde fueron alojados La Central de Trabajadores de Argentina (CTA), delegación Villa María, ratificó ayer, a través de un comunicado, “que las violaciones a los derechos de los ciudadanos que viajaban en colectivo hacia Buenos Aires (que fueron) detenidos en nuestra ciudad, se concretaron mediante diferentes acciones...cometidas por la Policía local en el procedimiento y cuando los ciudadanos afectados estaban alojados en la Comisaría” de esta ciudad. El texto del comunicado de la CTA-Villa María, que firman los dirigentes Jesús Chirino y José Luis Bernabé, expresa en forma textual: “Ante las versiones públicas de la Policía local, acerca de la detención de un grupo de artesanos en la primera hora del día viernes pasado en la Estación de Omnibus, desde nuestra Central señalamos algunas precisiones que no han sido tenidas en cuenta por la autoridad policial”, sostiene el nucleamiento obrero. “En primer lugar, se informa que, debido a las denuncias por la violaciópn de derechos básicos y elementales de todo ser humano, cometidas por la Policía local en el procedimiento y cuando los ciudadanos afectados estaban alojados en la Comisaría (de Villa María), se dio intervención a la Dirección de Derechos Humanos del Gobierno de la provincia de Córdoba” y que, “ante la gravedad del caso, y con un importante ánimo de constituirse en terreno, viajaron a la ciudad las autoridades de esta repartición”. Asimismo, se precisa que “las violaciones a los derechos de los ciudadanos que viajaban en colectivo hacia Buenos Aires, siendo detenidos en nuestra ciudad, se concretaron mediante diferentes acciones, entre las cuales mencionamos la propinación de fuertes golpes (produciendo importantes heridas), insultos, burlas, condiciones de detención reñidas con el estado de derecho, la no identificación de los policías (con nombre de cada uno) ante los ciudadanos, les hicieron tirar orina, no se les entregó certificado médico de las revisaciones realizadas”. “Autoridades de la CTA -continúa el comunicado- se entrevistaron con los mencionados delegados del Gobierno provincial, antes y después del encuentro que los mismos tuvieron (con) el comisario Daniel Oscar Ferreira y otras autoridades policiales. Las autoridades de Córdoba emitirán un informe que no sólo abarcará lo sucedido en esta oportunidad, sino también la opinión que se formaron luego de visitar las celdas y evaluar las condiciones de las personas allí detenidas”. Se agrega: “Recordamos que los calabozos, según ya se ha establecido, deben ser remplazados por otros aptos para ser habitados por seres humanos. A los presos que no son locales no se les da de comer y no son pocos los que hablan de tratos reñidos con el estado de derecho que vivimos”. Al respecto, “la CTA ha trasladado a las autoridades de DDHH de la provincia algunas denuncias que han llegado a la Secretaría de Derechos Humanos de la central acerca de la detención y demora de jóvenes de escuelas locales, incluso estudiantes de escuelas especiales, que circulaban sin realizar ninguna actividad ilícita en las calles de la ciudad”. “También se ha informado de la preocupación despertada por el comunicado que, luego de una reunión entre sectores del empresariado local y la Policía, se diera a conocer hace unos días. En el mismo se valora como positivo el índice diario de personas demoradas por la aplicación del Código de Faltas provincial. Ante este hecho, debemos advertir que puede confundirse a la opinión pública haciéndole creer que la demora de mucha gente por infracciones al mencionado Código de Faltas contribuye a la seguridad pública. Los comisarios nuevos también suelen demorar gente para “mejorar las estadísticas”, cosa que no favorece la seguridad sino, todo lo contrario. Téngase en cuenta que en algunas de esas ‘demoras’ se aplican artículos largamente cuestionados por diferentes organismos de derechos humanos como la figura del ‘merodeo’, o la llamada ‘prostitución escandalosa’. Estas figuras históricamente han sido cuestionadas por los niveles de arbitrariedad con los cuales suelen ser aplicadas, sancionando lo que de manera popular suele denominarse ‘portación de rostro’”, se explica en el comunicado. “Desde la CTA -se concluye- consideramos que la ciudad debe contar con una Policía altamente profesionalizada y con clara conciencia de que los ciudadanos sospechosos o culpables de un delito no pierden su condición de ser humano. Si el cuerpo policial no respetara ese marco legal básico, poco podríamos esperar de los ciudadanos en general. La seguridad se construye desde el respeto del derecho”. PUBLICADO EN "EL DIARIO", EMPRESA RECUPERADA POR SUS TRABAJADORES DE PRENSA Y GRÁFICOS.